26.02.2020

PREVER Y DISIPAR LESIONES MUSCULARES EN EL PUESTO DE TRABAJO

Las lesiones musculares son actualmente la primera causa de incapacidad laboral. Según el Colegio de Fisioterapeutas, con un buen programa de prevención y promoción de la salud, las lesiones musculares se pueden llegar a reducir en más de un 80%.

 

Pero ¿Qué son exactamente las lesiones musculares?

Las lesiones musculares son situaciones de dolor, tensión o molestia que se pueden dar en cualquier parte de nuestro organismo. Son lesiones que afectan a las partes blandas de nuestro cuerpo y donde a menudo, también se pueden ver asociadas un componente lesivo a nivel de otras estructuras tales como el ligamento, nervio, vaso sanguíneo, etc. Muy a menudo cuestan de identificar y catalogarlas, pues el dolor es el síntoma, y éste es muy subjetivo.

 

Factores causantes de lesiones musculares

Muchas veces la persona afectada no sabe el porqué de las molestias que tiene ni es capaz de asociarlo al origen como un mal gesto, una mala postura o una caída reciente.

Raramente, las lesiones musculares que podemos sufrir en el propio puesto de trabajo se desencadenan por un simple mal gesto. Suelen ser la suma de diferentes factores que hacen que finalmente nuestro organismo sea incapaz de seguir autorregulándose y caiga en un estado de fragilidad.

Los principales factores causantes de lesiones de este tipo pueden ser malas posturas, gestos repetitivos y mantenidos en el tiempo, largos periodos en sedestación (posición sentada sobre los isquiones y con la columna vertebral en posición vertical) a lo largo del día, entre otros. Esta serie de factores, sumados a un gesto brusco, caída o una mala postura a menudo son los que desencadenan la lesión como tal y la principal consecuencia será el dolor.

 

Dolor muscular

El dolor es conoce, como hemos dicho antes, por una percepción sensorial localizada y subjetiva que se presenta como resultado de una excitación de las fibras nerviosas especializadas y encargadas de transmitir el dolor por la asta posterior de la médula espinal.

El dolor puede cursar de diferentes maneras: dolor en reposo, en movimiento, en una postura determinada, etc. Todo ello dependerá de la zona afectada y de si hay involucrado algún otro tipo de problema (ligamentoso, discal, facetario …) aparte del muscular.

Muy a menudo pensamos que este tipo de dolor desaparecerá, o que simplemente con antiinflamatorios ya no volverá a aparecer. Aquí es donde toma gran importancia un buen programa de promoción y prevención de la salud como el que FIATC Residencias está implementando para sus trabajadores de la mano de Fisioreact.

 

Soluciones al dolor muscular

El ejercicio terapéutico es una herramienta indispensable si queremos evitar lesiones en nuestro puesto de trabajo. El objetivo del ejercicio terapéutico es mantener a la persona en unas condiciones de salud óptimas y disminuir el dolor que pueda sufrir. El ejercicio terapéutico como tal busca una solución individual al dolor de la persona mediante una terapéutica personalizada que permitirá reforzar las zonas más debilitadas y propensas a poder caer en un estado de fragilidad o lesión.

Los principales objetivos del ejercicio terapéutico son los siguientes:

– Evitar la pérdida de la funcionalidad.

– Prevenir y aumentar las capacidades motrices.

– Aumento del rango de movilidad y de la propia elasticidad de los tejidos.

– Reducir los dolores musculares.

– Ralentizar la aparición del deterioro físico.

 

Prevención de lesiones musculares

Para diseñar un buen plan de prevención y promoción de la salud, hay que tener en cuenta diferentes variantes de ejercicios adaptados a cada caso. Los tres grupos principales de ejercicios que hay que tener en cuenta a la hora de diseñar un plan completo y efectivo son los siguientes:

 – Ejercicios de movilidad: enfocados a recuperar el rango de movimiento de las articulaciones afectadas y con el fin de volver a las actividades de la vida diaria y la práctica deportiva sin riesgo de poder sufrir un episodio lesivo.

Ejercicios de tonificación: enfocados a aumentar y mejorar la masa muscular. Este tipo de ejercicios tendrán un papel muy importante para ayudarnos a evitar futuras recaídas de la zona afectada.

Ejercicios de elasticidad: con el fin de recuperar la capacidad elástica del músculo y permitir al cuerpo una mayor capacidad de adaptación ante episodios lesivos.

 

La constancia, clave para un resultado favorable

La importancia de estas pautas es la constancia. Cuando se pauta una rutina de prevención y promoción de la salud, hay que ser constante y estricto en seguirla. A menudo sucede que iniciamos un programa y a los pocos días lo dejamos de realizar. Estas pautas nos ayudarán a reeducar a nuestro organismo para evitar sobrecargar las zonas que más tendencia tienen a sufrir dolores y poder reforzar los puntos más débiles.

Debemos ser conscientes de que, a lo largo de la vida de cada individuo, el cuerpo va haciendo pequeñas modificaciones para adaptarse al medio. Para ayudarle a reorganizarse y a ser de nuevo el máximo funcional posible, se necesita de una disciplina y trabajo constante que permitirá a la persona acabar teniendo unos resultados muy favorables a largo plazo y erradicar el dolor crónico instaurado en aquellas zonas típicas de cada organismo.

Las jornadas laborales son largas ya menudo muy cansadas. Poder establecer dentro de estas mismas, breves momentos de estiramientos o de ejercicios facilitará que no haya una sobrecarga en el organismo y que nuestro lugar de trabajo no sea uno de los factores desencadenantes para nuevas lesiones musculoesqueléticas.

 

Albert Valls, co-fundador de Fisioreact

 

 

Raramente, las lesiones musculares que podemos sufrir en el propio puesto de trabajo se desencadenan por un simple mal gesto.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Los principales factores causantes de lesiones de este tipo pueden ser malas posturas, gestos repetitivos y mantenidos en el tiempo, largos periodos en sedestación a lo largo del día, entre otros. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Muy a menudo pensamos que este tipo de dolor desaparecerá, o que simplemente con antiinflamatorios ya no volverá a aparecer.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El ejercicio terapéutico es una herramienta indispensable si queremos evitar lesiones en nuestro puesto de trabajo.

 

 

 

 

 

 

El objetivo del ejercicio terapéutico es mantener a la persona en unas condiciones de salud óptimas y disminuir el dolor que pueda sufrir.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuando se pauta una rutina de prevención y promoción de la salud, hay que ser constante y estricto en seguirla.