27.03.2019

Atención Centrada en la Persona, un reto de futuro en el sector de la tercera edad

Una de las tendencias que se está imponiendo en los últimos años en el sector de la tercera edad es la atención centrada en la persona (ACP).

Los profesionales del cuidado a las personas mayores o a personas con necesidades especiales, se están concienciando del uso de esta disciplina como herramienta de mejora continua en la calidad del servicio que proporcionan a sus usuarios. Pero ¿qué es la ACP y cómo puede llevarse a la práctica?

 

La persona en el centro

Como su nombre indica, la Atención Centrada en la Persona pasa por priorizar las preferencias y circunstancias de cada individuo por encima de otros factores en el momento de ofrecerle cuidados. Aspectos como la historia de vida, las voluntades anticipadas, las preferencias alimentarias, actividades de ocio e interés favoritas, horarios en los que le gusta hacer las cosas, sus ritmos vitales y muchos otros detalles (que forman parte del universo de cada individuo) pasan a ser prioritarias en ACP en lugar de perderse en el proceso de integración y adaptación que presupone la institucionalización de las personas en centros para mayores.

 

Música, recuerdos y animales

Hoy en día, los profesionales del cuidado a las personas de la tercera edad utilizan recursos como la musicoterapia con criterio terapéutico. Se integra en la cultura de la organización como un elemento clave y diferenciador en el cuidado de personas con demencia en el marco de la ACP. Está demostrado que favorece el refuerzo de las funciones preservadas, reduce la apatía, favorece una mayor implicación de los usuarios en las actividades, reduce la ansiedad y agitación e incide de forma muy positiva en una mayor y mejor comunicación por parte de las personas mayores con deterioros cognitivos leves y severos.

También se estilan terapias con animales o muñecas para trabajar las emociones y, en definitiva, añadir un poco de mística a la técnica para fomentar las ganas de vivir y la esperanza en personas mayores que pierden de forma progresiva el interés por la vida.

 

La aplicación de la ACP

No existe un método o un modelo de atención centrado en la persona generalista, los recursos aparentemente son insuficientes y el alcance del proyecto es de dimensiones gigantes.

Todos estos condicionantes dificultan la puesta en funcionamiento del modelo, pero, aun y así, el sector apuesta por este modelo de atención y los profesionales lo tienen claro. Estos, aplican la ACP teniendo muy presentes los detalles más pequeños a la hora de tratar a una persona como él o ella desea.

Los avances para lograr una mejor atención centrada en la persona son pocos y los profesionales, del cuidado y atención a la tercera edad, deben favorecer los modelos biopsicosociales sobre los hospitalario-rehabilitadores. Las instituciones donde viven las personas mayores deben asemejarse más a su hogar que a un centro hospitalario para desprenderse del estigma que las precede en beneficio de un futuro de aceptación social.

 

Helena Aranyó, Directora de Apartamentos Cugat Natura

 

 

 

 

 

 

 

 

La Atención Centrada en la Persona pasa por priorizar las preferencias y circunstancias de cada individuo por encima de otros factores en el momento de ofrecerle cuidados.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

No existe un método o un modelo de atención centrado en la persona generalista, los recursos aparentemente son insuficientes y el alcance del proyecto es de dimensiones gigantes.